LA SOBERBIA Y SU DINÁMICA ACTUAL.
El amor y la pasión por las almas, es todo lo que nos hace
ser y hacer en Dios cuando el momento así lo amerita. Estamos construidos de
sentimientos que han sido renovados, de vidas que han debido sufrir procesos tremendamente
difíciles en muchos de los casos para que, en medio de las dificultades, aprendamos
a ceder al influjo del Espíritu de Dios en nuestros corazones, lo cual nos
convierte en blancos directos de una influencia sobrenatural que no se deja
esperar cuando necesita que le oigamos.
Dios no está en silencio, nunca lo está, entre todo el
bullicio que somos capaces de producir con nuestros equipos a todo volumen, entre
toda la sordidez y la confusión que provocamos con nuestros propios y egoístas estilos
de vida, esa Voz, La Voz de Dios, que pudo quebrar vidas como las de Saulo de
Tarso, la de un Pedro, que acumulaba experiencia y vida allí, junto al Mar de
la vieja Galilea, nos quiere alcanzar, no habrá día en el que Él, invirtiendo
fuerzas y proyectos en nuestras existencias, permita que la maquinaria que
fuerza todas las vidas hacia una constante que nos aleja de Su Amor, haga lo
que quiera.
Estamos involucrados en un proyecto eterno que nos demanda
esfuerzos y la toma de grandes decisiones, no es de otra forma, los sinceros y
honestos lo saben, saben que es así, mientras, Ministros de Dios, atragantados
y cegados por la vanidad y la soberbia, no desean sumergirse con valor en esa
clase de vida que le agrada a Dios, persisten en manejar a los seres humanos
como si fuéramos niños, como si no tuviésemos la capacidad de comprender, qué o
cuáles cosas debemos hacer parte de nuestro ser con la ayuda de Dios, ellos se
esmeran en hacerle creer a los demás que por el hecho de que son pastores, apóstoles,
o lo que sea, están destinados a manipular la conciencia de las almas sin que
el ser humano, pueda resistirse y comprobar por sí mismo, si esa clase de
experiencia, corresponde o no a lo que Dios en verdad nos demanda.
La religión está llena de ellos, sin embargo, puedo
entenderlo de parte de personas que tal vez, ya han vivido mucho tiempo, y que por
eso mismo, están seguros de lo que están diciendo, al menos así ellos lo creen.
Lo contradictorio o penoso para mí, es darme cuenta que ministros jóvenes,
hombres que aún no tienen idea de lo que es vivir por Fe en El Señor, se sitúen
por sobre los demás con este carácter tan propio de ancianos, de personas que
lo han experimentado absolutamente todo, los he oído, como esta noche, atrapados
en un mundo que no te permite considerar a los demás como parte de ti, solo me
hace pensar que en este tiempo, será muy difícil ayudar a que el mundo
cristiano protestante, pueda cambiar algunas cosas, algunas digo porque, pedir
que cambien toda una manera de pensar, es muy difícil, más aún cuando muchos de
estos “ministros de Dios”, dependen de sociedades u organizaciones que son capaces
de defender hasta los errores que cometen.
Yo no nací hoy día, estoy aquí porque Dios así lo quiere, no
tengo dudas de ello, sé que estamos llenos de pedantes, de orgullos
responsables de que el pueblo de Dios, aprenda cada vez menos de las cosas de
Dios, y que por la conducta de estos mismos pedantes, muchos jóvenes y personas
que deberían en estos mismos momentos estar sirviendo a Dios, ocurra lo
contrario, que cuando eres capaz de mostrarles lo que Dios te ha dado con tanto
Amor, pasen a ser ellos mismos los críticos, los que con sus actitudes y formas
de entender la vida espiritual y valórica, determinen si lo que haces para Dios,
con todas las energías que debes invertir en esto, es bueno o no sirve para
nada. Si eso no es soberbia, si ello no es orgullo, ¿qué es?
Es de lo que está lleno el pueblo protestante, de majaderos,
de gente que no desea sentir en sus almas el peso de la humildad del Señor, contrariamente,
se esfuerzan en mantenerse a lo lejos de toda persuasión que provenga del Santo
Espíritu de Dios, y con ello, solo demuestran que El Señor Jesús, no sólo no ha
podido hacer una Obra verdadera en ellos, sino que además, que tiene para rato
el que el mundo protestante, pueda reconocer que se ha equivocado y que
necesita con urgencia de salvavidas, de varios, o mejor dicho, de una manera en
la que ellos puedan comprender el valor de la fe cristiana, antes que se acabe
el tiempo destinado y permitido por El Señor.
f. navarro m.
cantautor cristiano chileno
0 Comments:
Post a Comment
<< Home