UNA FORMA DE CRISTIANISMO SIN RETORNO.

Convertir nuestras vidas en lo que Dios quiere, puede que sea una tarea casi imposible de desarrollar en un mundo como en el que hoy vivimos, considerando las condiciones que hoy mismo enfrentamos, tanto en lo valórico como en lo espiritual, todo converge hacia una condición que nos enfrenta con verdaderas murallas que nos impiden realizar con libertad lo que Dios nos ha pedido que hagamos, desde mejorar nuestras circunstancias de vida, hasta hacer lo imposible por cumplir con las tareas que Él nos ha encomendado.

Es lo concreto, es lo que no pueden ocultar los creadores del Evangelio actual, colmado de luces y estadios sembrados de salones con sillones a disposición de los que no desean mover un solo dedo para ir en ayuda de una humanidad sobrepasada de dolor y miseria. Todo se concentra en el placer, en el bienestar de la bendición material, es el antiguo HEDONISMO, tan propio del mundo Griego que hoy, el cristianismo perverso de la prosperidad, ha puesto en boga en la vida de millones de personas en el mundo entero, sin proveerles del enorme significado y peligros que ello conlleva, por el tipo de vida espiritual que allí se cultiva, por el estilo de vida que allí se reclama para que los cristianos todos, vivan arropados y llenos de bendiciones materiales.

Todo ha sido manejado de este modo por los propios Ministros de Dios, de manera que La Palabra del Señor, no surta ningún efecto cuando Dios mismo, por medio de Su Espíritu Santo, demande de esta forma de cristianismo, consecuencia, resultados, está a la vista, no desean ser auscultados, no desean ser explorados, ellos viven lo que sienten y punto, nadie será lo suficientemente fuerte como para hacerlos cambiar de opinión, lo cual demuestra con una veracidad profética, que todo lo que La Escritura advierte con respecto al período llamado LA GRAN TRIBULACIÓN, no solo es cierto, sino que además, que para que se cumpla exactamente como lo dicta La Bendita Palabra de Dios en sus escritos ESCATOLÓGICOS como, Daniel, Apocalipsis, parte de Tesalonicenses, y otros más, es necesario que exista un tipo de CRISTIANISMO APOSTATA que no dé tregua alguna al Santo Espíritu de Dios.       

Es lo que hoy estamos viendo, con una claridad abismante, sin duda alguna nos encontramos frente a una realidad espiritual que no ha logrado comprender la profundidad de lo que La Biblia quiere decir cuando nos habla de ese período en específico, un tiempo en donde la vida espiritual no contará con las mismas condiciones que hoy cuenta esta forma de cristianismo, por su puesto que no, se trata de grandes desastres, de castigos, de una impugnación por parte de Dios a través de fenómenos naturales jamás vistos, a todo un sistema liberal de fe que fue capaz de transgredirlo absolutamente todo, no, Dios no dejará sin castigo a quienes corrompieron sus corazones y dieron marcha libre a una forma de fe indiferente, basada en las ambiciones personales, en olvidar el sufrimiento de tantos y tantos seres humanos en el mundo entero. Al que creó LAS BIENAVENTURANZAS y dio EL SERMÓN DEL MONTE allá en la vieja Galilea, no le agradará encontrar en esta tierra, edificios levantados en Su Nombre Santo a costos millonarios, mientras, en torno a estas mismas realidades, pululan personas desprovistas de lo necesario para sobrevivir.

Desde el momento en que mi hogar se quebró y perdí el contacto diario con mis pequeños hijitos, supe que todo lo que vendría de ahí en adelante sería servir a Su Propósito, porque el tiempo que vivimos nos señala lo inevitable, lo irrevocable y necesario como es, LA PRONTA MANIFESTACIÓN DEL SEÑOR JESUCRISTO A ESTE MUNDO, es lo que muchos en la historia quisieron ver y no pudieron. Por ello, tengo la más absoluta certeza aquí en mi alma, de que el tiempo se le acaba a este mundo, a este cristianismo que no desea revertir su condición moral ni espiritual, habiendo comprendido que las cosas de Dios, más temprano que tarde se cumplen, con precisión divina, con exactitud celestial, para que no quede duda alguna que Él, cumple lo que dice, y que Su Palabra nunca pasará de moda ni miente.

Por ello, el desear hacer Su Voluntad, guardarse del pecado, vivir en SANTIDAD, protegerse de los peligros de este mundo, es algo que no será fácil si le hemos dejado a este mundo la dirección de nuestro andar, si no hemos considerado toda la enorme cantidad de textos bíblicos que nos hablan del costo de ser hijos de Dios en medio de un sistema que no desea ser modelado por Dios, por el contrario, entonces, no hay nada que se pueda hacer, nada, en absoluto, y solo quedamos expuestos a un tipo de misericordia que no nos exime de lo que deberá acontecer cuando el período de La Gran Tribulación, se haga efectivo. 

Mientras tanto, los cabos sueltos que aún quedan de una profecía que abiertamente nos muestra el destino de esta humanidad, incluido EL CRISTIANISMO APÓSTATA, sigue alertándonos, continúa advirtiéndonos a través de imágenes perturbadoras, que esto no es un juego, sino que el tiempo de resolver los problemas, se le acaba al hombre y a los cristianos que viven en ese tipo de realidad espiritual totalmente desaprobada por Dios.

f. navarro m.

cantautor cristiano chileno