DE LIBERTAD Y LIBERTINAJE ACTUAL.

En tanto, nos vamos acostumbrando a que nuestra vida se ciña sin ningún tipo de oposición u obstáculo, a todo lo que este sistema nos dicta, no nos atrevemos a romper con las barreras que nos imponen quienes determinan lo que debemos pensar y hacer con nuestro valioso tiempo, es lo que nos han indicado nuestros predecesores, por lo tanto, no haremos nada para impedir que el tedio termine por subordinar nuestro modo de vida, estamos hechos de este modo, nuestros padres lo vivieron así, de modo que nuestras libertades siempre estarán condicionadas.  

Es lo que el Señor trató de enseñar a las personas de su tiempo a través de Su Evangelio, el valor de nuestra libertad, la importancia de sabernos seres creados a imagen de Un Dios Omnipotente que desea intervenir la historia del hombre en este tiempo. No fue fácil para Él expresar o manifestar un mensaje semejante en medio de un sistema político que era gobernado por Roma, ellos no querían saber nada acerca de este mensaje, los revolucionarios y sediciosos eran lacerados y luego crucificados, así terminaba esta clase de arrojo contra un imperio que no tuvo piedad alguna para castigar a quienes se atrevían a desafiar la autoridad de sus gobernantes.

Sin embargo, el mensaje del Señor no sólo fue oído por sus coterráneos, sino que además, logró llegar a diferentes lugares del mundo conocido por medio de uno de los hombres más importantes que dio a luz el cristianismo de aquél tiempo, Saulo de Tarso, o Pablo, como fue conocido, él se encargó de exportar un mensaje enorme para una sociedad sojuzgada y expuesta constantemente a la tiranía de uno de los imperios más poderosos que hemos conocido, Pablo fue capaz de darle sentido al mensaje del Señor, y a la vez, enseñarlo de manera que quienes recibieran este mensaje, también fueran capaces de administrarlo a otros, todo un logro considerando las grandes distancias y obstáculos que debió enfrentar a través de su vida para alcanzar a un máximo de gente.

Pablo entonces, el Apóstol del Señor después de Su Resurrección, logró capitalizar el mensaje de Cristo y darlo a conocer a diferentes culturas de aquél tiempo, como la misma Grecia, que había dado a la humanidad, hombres tan importantes como Aristóteles, el mismo Sócrates, La Ilíada  de Homero, y tantos otros más, Pablo fue a la cuna misma de la filosofía a contar esta nueva de que el hombre ha nacido libre, al igual que Su Creador, y que la única forma de acceder a este tipo de conocimiento, no es por medio del conocimiento intelectual sino, dando lugar en el corazón del hombre al Amor y al mensaje de Cristo. Para ejecutar y tener los logros que él tuvo con semejante trabajo, Pablo mismo había sido un perseguidor, uno que había estado al otro lado de la vereda, fue un hombre que se preparó desde su niñez para defender los preceptos judíos, los cuales aún no han cambiado, solo que hoy, no hay gente con el espíritu de Pablo para emprender el viaje.

Pues bien, el mensaje de libertad a través del Señor Jesucristo, rompía con todos los estandartes  antes establecidos por filósofos y pensantes de las diferentes sociedades en las cuales él anduvo, porque primero, no se trataba de un mensaje exclusivista, por el contrario, por la calidad del mensaje, todas las personas podían acceder a este tipo o estilo de vida que Jesús había planteado, tanto amos como esclavos, y luego, porque Pablo, como hombre preparado cultural y filosóficamente, pudo comunicar el mensaje sin problemas, pues manejaba muy bien varios idiomas, los cuales le permitieron con mucha claridad acceder a las distintas comunidades de aquél tiempo, ello sin duda le valió el éxito que tuvo en su trabajo misionero, y en conjunto además a la rica experiencia que vivió cuando iba en carácter de perseguidor de “los del Camino”, como se les llamó en primer término a los cristianos, en el camino a Damasco.  

El hombre ha nacido para vivir en libertad, es inobjetable, ya hemos visto en la historia los grandes desastres relacionados con el tema de la esclavitud, la misma religión católica torturó y mató seres humanos en El Nombre de Cristo en uno de los períodos más terribles de la historia como fue, el de La Inquisición. Pero esta libertad que nos ha planteado El Evangelio de Jesús, que es el mismo de Pablo, está relacionada con el gran tema del pecado del hombre, y de cómo el hombre puede en Cristo resolver este problema, en un mundo secularizado en su totalidad, el tema de la redención humana, prácticamente no se trata, el truco de la mayoría es decir a veces, que se es de tal o cual agrupación religiosa, o simplemente que la persona no cree en Dios.

Hemos visto a lo largo de toda la historia humana, el cómo el hombre ha buscado autogobernarse, es decir, poner en práctica un tipo de libertad que no le deja ver su problema con el pecado, muchos son los pensadores y filósofos que ha producido la humanidad para contradecir el mensaje bíblico, para ello, sin necesidad de contradecir, han interpretado la vida de Jesús desde una perspectiva humanista, es decir, poniendo en duda los milagros, las sanidades, el nacimiento virginal del Señor, la muerte y resurrección, todo se ha centrado en el cuestionamiento a la veracidad de Los Evangelios, y por lo tanto, Cristo no es un personaje histórico.

Sin embargo, quienes hemos depositado toda nuestra confianza y fe en Él, después de haber releído los escritos de grandes filósofos y escritores que niegan la existencia de Dios y por lo tanto, ven a Jesús como un revolucionario nada más, hemos llegado a la conclusión de que Jesús tenía razón, no solo en cuanto al tema del pecado del hombre, sino, a otros temas también importantes como el perdón, el no hacer con otros lo que no quisieras que hicieran contigo, principio ético que mueve la vida del cristiano. El interés entonces está cifrado en el concepto de libertad que hoy día y siempre maneja la humanidad sin Cristo, una libertad comprendida en lo que hoy nos ha tocado vivir, es decir, una libertad plagada de nihilismo, ateísmo, y otras muchas filosofías más que conforman un cóctel filosófico que nutre el alma de una sociedad como lo nuestra, vacía espiritual y moralmente.

Allí estamos nosotros, en medio de esta sociedad, en donde las libertades ofrecidas a los seres humanos, transgreden las propias normas de Dios, lo cual representa en su carácter ético, una de las bofetadas más fuertes en contra del planteamiento del Evangelio de Jesús, hoy, el hombre con la mujer se han igualado, y ello, obviamente, ha traído un estilo de vida que va mucho más allá del concepto de libertad, ahora ya estaríamos hablando de libertinaje, que no es otra cosa más que, dejar que el hombre haga, que nada ni nadie puede impedirle que él forje la identidad de su propia vida, tanto en lo moral como en lo espiritual, en esta clase de realidad o reconstrucción del hombre, no hay leyes o normas que rijan al hombre en su mundo interior, por lo tanto, el hombre queda expuesto, como criatura creada, a una expectativa inevitablemente apocalíptica, debido a que en su transgresión, la humanidad ha dejado de lado el mensaje de Cristo, y ello por lo tanto, significa que la muerte y resurrección del Señor, nada tiene que ver con sus vidas.

Vivir en libertad en este tiempo entonces, significa desprenderse de toda regla establecida, así que por lo tanto, el planteamiento de Jesús queda fuera, el hombre debe autogobernarse, lo ha logrado, y Dios lo ha permitido, sin embargo, la libertad a la cual Jesús hacía referencia en Su Evangelio, se opone a este tipo de pensamiento, porque al final, el hombre que no ha sido redimido o no ha experimentado el perdón en su vida, el perdón del Señor, continúa viviendo una esclavitud, una fuerte servidumbre que le aliena, en todos los sentidos, para que no pueda advertir la importancia de saberse bendecido por Jesucristo, ello finalmente, traerá, como lo hemos estado viendo, grandes desastres morales en el mundo entero, como el matrimonio entre homosexuales, la legislación a favor de permitir que nuestros hijos elijan el sexo, su propio sexo, las leyes que permiten el aborto, en fin, todo un panorama oscurísimo que no tiene otra lectura más que, la llegada de un apocalipsis anunciado y predicho por los profetas, y ello, inevitablemente, acompañado de grandes y poderosos desastres naturales que La Biblia indica para estos tiempos, los tiempos finales de un proceso en el cual Dios, intentó por todos los medios de llegar al hombre con Su Evangelio, el cual, no  solo fue rechazado por la humanidad, sino que también, pisoteado por aquellos que no ven el riesgo o el peligro que se cierne sobre una humanidad a la cual, el tiempo de La Gracia, simplemente, se agota.

f. navarro m.

cantautor cristiano chileno